jueves, 22 de noviembre de 2012

Alguna vez.....

¿Alguna vez has mirado a alguien, fijamente a los ojos y has sentido que todo lo demás que te rodea no importa? Que da lo mismo dónde estés, quién pase alrededor, cómo sea el lugar, qué tiempo haga o que ropa llevas en ese momento, que da lo mismo los días que te queden por vivir, porque para ti esa persona es  el principio y el final.

¿Alguna vez has abrazado a alguien, con todas tus fuerzas y has sentido que estáis compenetrados? Que vuestra respiración está sincronizada, que vuestros latidos van a la par, que llega un momento en el que no sientes nada, ni el torso, ni las manos, simplemente porque te has fundido con la otra persona entrelazando vuestros lazos.

¿Alguna vez has escuchado a alguien, con muchísima atención y has sentido que cualquier otra historia no tiene significado? Que lo que los demás digan, cuenten o inventen no tiene relevancia, que las palabras del resto del mundo son necias y vanas, que se esfuman cual humo en el aire, que los sonidos que emite esa persona son los más hermosos que jamás has oído, y que para ti, cada frase es un piropo para tus sentidos.

Sea quien sea a quien hayas mirado, sea quien sea a quien hayas abrazado, sea quien sea a quien hayas escuchado, procura tener siempre a esa persona a tu lado.
Sea lo que sea lo que hayas sentido, no etiquetes, no definas, no intentes ponerle un nombre... simplemente guárdalo en tu corazón y haz que sea infinito...

Hoy por fin logro entender que la magia está en mi, en ti, la magia es todo....
Aprendí a escuchar las voces del alma...
a interpretar cada señal, 
a gritar cuando quiero callar, 
a reir cuando quiero llorar, 
a vivir cuando toca soñar, 
a correr cuando hay que esperar, 
a no caer al tropezar, 
a no temer a la verdad...
Descubrí que el negro no es ningún color, que no existe el infierno, que sonreír es una eficaz cura contra el dolor...
Me dí cuenta de que la tormenta puede resultar más bella sino la observas a través de un oscuro cristal...
Toma mi mano y te mostraré que no es tan difícil como piensas, deshazte de ese manto de oscuridad que te impide ver el arco iris y descubre conmigo los siete colores que adornan tu vida, ahora dime:
¿Sientes la magia?
Cómo no sentir la magia...
Aunque la tormenta sólo muestre el hielo...
Aunque se apagase el azul del cielo...
Aunque el SI, se transforme en NO...
Basta detener la vida un momento y pararse a mirar el corazón, para terminar dándose cuenta de que la magia respira con fuerza por cada rincón de toda ilusión cuando una sonrisa se puede convertir en el motor de la esperanza, del reinventarse para observar esos colores que se crearon para ver las cosas bellas de la vida...

También tenemos otra opción:
Bajar la vista agotado, desear derramar lágrimas que se niegan a salir y pensar.
Pensar en un preciso momento en el que él/ella parecía desearte con todas sus fuerzas, en el que vuestros brazos se enredaban en un arrebato de pasión  y tú sonreía engañado/a.
Quizá tu cara se cubrió ene se momento con una máscara, él/ella no aprendió tus gestos y su corazón te confundió con otro/a  y sus labios bebieron de otra piel, que tú pensaste que era la tuya.
Dos voces ahora en tu interior, dos voces que gritan  por ser oídas: una te atormenta el alma, te hace ver entre tinieblas, te repite que tus ojos a través de la máscara no consiguieron desvelar tu verdadera identidad, que para él/ella en ese momento nunca fuiste tú; otra te enloquece con el recuerdo de sus labios y sus gestos enamorados y tus uñas rasgan tu piel al sentir de nuevo su pasión.
Y ahora ya no puedes evitar las lágrimas, ya no puedes evitar vivir de nuevo en el mundo de las dudas, del amor y del odio, ya no puedes evitar vivir de nuevo en el mundo del dolor.

Y entonces es cuando me encantaría, en esos momentos de tristezas, no recordar no lo sucedido, ni lo pasado si no vivir el presente, sin complicaciones, con la felicidad que se tiene por todo en el día a día.....

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