Ya se acerca la Navidad....

En dos semanas y poco, estamos metidos de pleno en esas fechas, que nos hacen ser mejores, ojala todo el año fuera Navidad, para desearnos los 365 días lo mejor, y, no sólo esperar a estas fechas para hacerlo.

En fin, que yo quiero escribir esto, para recordar o para recordarme lo que para mí son estas fechas, así que voy a empezar con mis recuerdos....

Lo primero que se me viene a la cabeza, es la primera Navidad que mi padre cenó en casa, el siempre trabajaba, pero esa noche no, no recuerdo cuantos años tendría, pero era pequeña, y la que me lo cuenta era mi madre, dice que cuando lo vi sentado y que no se iba, trepe hacia él, cogí su cara con mis pequeñas manos y le dije: "que guapo eres papa" y le dí un beso. Según mi madre, mi padre se emociono y esa noche todo el cariño y todas sus sonrisas fueron para mí.

También me cuentan, que siempre me a gustado mucho el marisco, y que siempre quería un "cangrejo grande", centollo, y que unas navidades compraron y que al verlos dije, joer que bicho más grande, yo quiero uno sólo para mi; así que mi primo Paco, me saco toda la carne, y me lo comí.

Y me acuerdo que al terminar de cenar, una de las noches que estuvo mi padre, cuando se fueron todos, estábamos los cuatro jugando a un juego, que no recuerdo cual era, pero que debería ser como el de la oca, la cuestión es que de lo que me acuerdo, es que en una casilla, decía que tenía que ir a por un huevo, y romperlo en la cabeza del de la izquierda, así que fui corriendo y aunque mi madre y mi padre gritaban que no lo hiciera, a mi padre le estampe to el huevo, era el que estaba a mi izquierda.

Y de los recuerdos de pequeña, también me viene la noche de reyes, de los Reyes Mágicos, como yo los decía, y eran mágicos, porque por mucho que lo pensará, era difícil saber como hacían para entrar en casa, y comerse y beberse todo, sin hacer ruido, para mi eran los más mejores, pero me enfadaba con ellos, porque pocas veces me dejaban todo lo que pedía o lo que yo quería, casi todos los años me dejaban una muñeca y la verdad es que ese no era mi rollo, así que si las muñecas hacían algo como por ejemplo patinar, la desarmaba entera y verdadera para ver como patinaba o para ver como lloraba.... Un año llegaron antes, recuerdo que mi madre me llevo a ver la cabalgata, y cuando viene ya estaban los regalos, la cuestión es que maree a mi abuela con preguntas, como quién ha venido, has hablado con él, se han comido todo los camellos.... por aquel entonces me dio, porque mi rey preferido era el señor Baltasar y sino me traía el los regalos no los quería, así que siempre venía él. Y como siempre me imaginación ha ido más allá que mi realidad, yo a mi Señor Baltasar siempre me lo imaginado, negro charol, con el pelo corto y rizado, con los ojos negros y una gran sonrisa y dientes super blancos, claro.

Yo sabía que por ahí, había un tiparraco, que era gordo y vestía de rojo, pero donde estuvieran y estén mis Reyes Mágicos que se quite el gorderas.

Según han pasado los años, me he dado cuenta o me daba cuenta, que la Navidad no sólo valía la pena por los regalos o por el marisco, sino por los buenos momentos que vives con tu gente.

Me encanta el día 22 de diciembre porque me levanto con ilusión, nunca me ha tocado nada, pero todos los años me digo, este año puede ser el mio. Luego no me toca, pero sigo con la misma ilusión, como si me hubiera tocado.

Me encanta el día 24, porque si voy antes de cenar a casa de mi tia Carmen huele a cena de Navidad, el horno con el cordero, con el pavo o con lo que sea pero huele a esa cenita. Huele a sonrisa y buen rollo, huele a familia y es un olor que me encanta. También me gusta ese día, porque por la mañana si engaño a mi padre, vamos a ver el ambiente en Toledo y porque no, comernos unas migas, en algún bar de por allí, me gusta ver a la gente cantando y divirtiéndose. Si me gusta también, es por salir a tomarme algo antes de cenar, que te bebes unas copitas y ya vas con esa chispilla a la cena, donde sueltas cuatro tonterías y todo el mundo se rie, y te encuentras con tu madre diciéndote, pequeña no bebas más que parece que te has comido un payaso o dos.

Si me gusta el día 25, es porque después de comer, vienen a casa de mi tía Carmen los que faltan y jugamos a cualquier cosa y nos tomamos unos cuantos copazos.

Y llegamos al 31, a casa de la abuela, siempre mi sitio es en medio de mi padre y mi tío Antonio, enfrente de mi madre y mi tío Juan, y que si empiezo con el vino, ya no paro, y veo a mi padre con cara de no bebas mas por Dios, que este viaje no te has comido un payaso sino una docena. Que al igual que el día 24, lo que más me gusta es ese olor a familia y a buenos ratos. Y que llegan las 12, y allí estamos todos, comiéndonos las uvas, otro año más con la abuela incluida, que ella ese día se acuesta super tarde. Y que cuando nos comemos las uvas, todos son besos y abrazos y todos decimos "que el año que viene sea mejor que este" que otra cosa no tendremos, que nos puede ir mal, pero que positivos somos un rato.

Por eso es por lo que me gusta tanto la Navidad, por mi familia, por mis amigos, por lo que se ha vivido durante ese año, por la gente que conoces y has conocido. Yo por suerte o por desgracia, estoy conociendo a gente, a gente de esos que se quedan en tu patata, sin saber por que, pero que hay están, gente que ya conoces y que permanecen y por los que vendrán.

Si hay tres cosas que me hacen un poco triste esta Navidad, es la falta de mi tío Jesús y de mis primos, Miguel y David, pero sé que estén donde estén, desearan, que nuestras navidades, sean igual que cuando ellos estaban , aunque se les echa de menos.

También escribía esto, para desear a todos los que leéis mi blog, FELIZ NAVIDAD Y FELIZ AÑO NUEVO, porque probablemente hasta el año nuevo no escriba.

Y también para dar las gracias a mi gente por estar ahí, desde mi familia, amigos de siempre, a mi flower, a mis tuturutu, a mi faty, a mi caste, a toda la gente que he conocido este año, no se a todos los que habéis formado parte de mi vida o formáis GRACIAS POR ESTAR AHÍ, y que últimamente no lo digo mucho, la verdad es que no lo suelo decir mucho, pero que os QUIERO MUCHOOOOOOO!!!!! 

En fin que a todos, a los blogeros, amigos, conocidos, familia, a los de aquí a los de allá, a los gordos, a los flacos, a los grandes, a los pequeños............ Que procuréis ser siempre como si fuera Navidad, tal vez así las cosas nos fueran un poco mejor.

Y para ir entrando en lo que es la Navidad, aquí os dejo un villancico, el que más me gusta y no es house, que conste.